viernes, 27 de septiembre de 2013

CIENCIA FICCION - 6TA PARTE

SEXTA PARTE


FUTURISMO


CYBORGS Y ANDROIDES

Fue quizás la serie setentera EL HOMBRE BIONICO ( con el actor Lee Majors) la que inauguró las posibilidades de este original tema, y que trajo como consecuencia toda una secuela de series y films, como la exitosa SOLDADO UNIVERSAL ( 1989 ) con el actor Jean Claude Van Dam y Dolph Lundgren, pero la cúspide de este tema llegó con la super exitosa saga ochentera de ROBOCOP con el actor Peter Weller, mostrando cómo la tecnología “puede” llegar a una perfección en la mezcla del organismo humano con la automatización, y aún así, preservar lo mejor de la humanidad por encima de la máquina.

BLADE RUNNER ( 1982, dirigida por el famoso director Ridley Scott y protagonizada por el famoso actor Harrison Ford ) es una película clásica que fue exitosa en su momento y luego se convirtió en una cinta de culto para los amantes de la ciencia ficción, presentando una sociedad futurista y fabricante de androides, los cuales se rebelan y son perseguidos para eliminarlos.


INTELIGENCIA ARTIFICIAL

En el año 1985 se produjo una película muy original tanto por su tema como por su sensibilidad : D.A.R.Y.L. ( Data Analyzing Robot Youth Lifeform ) que trataba de un tierno y adorable niño sin memoria que andaba perdido, pero en realidad era un robot casi humano.
Quince años después el famoso director Steven Spielberg rescató el mismo tema infantil-autómata con el film INTELIGENCIA ARTIFICIAL ( 2001 ) que replanteaba la pregunta ¿las máquinas pueden llegar a pensar y a sentir como los humanos?
De todos modos, como el tema en sí fue exitoso, no podía faltar una serie humorística como la recordada y ochentera LA PEQUEÑA MARAVILLA.

Existe otra pregunta ( casi capciosa, pero terrible ) que siempre nos hemos planteado : ¿Quién es más inteligente, el ser humano o las máquinas? ( algo así como ¿Quien fue primero, el huevo o la gallina? ) La respuesta vino con la película SATURNO 3 ( 1979, protagonizada por el actor clásico Kirk Douglas y Farrah Fawcett ) donde un robot llamado “Héctor” se apodera de una estación espacial. No importa si el ser humano creó a la máquina, ésta puede llegar al extremo de pensar por sí sola, ser malvada y esclavizarnos ( ¿tal vez una sublimación sobre la rebeldía del ser humano contra dios? ) lo cual sería una raya más al tigre, pues el ser humano constantemente muere por su propia mano, es decir, sus propios inventos son un peligro para él mismo. Cinco años después, esta temática fue relanzada con mejor dirección y mejores efectos en la famosa saga TERMINATOR ( 1984, con el famoso Arnold Schwarzzeneger ) y diez años después, con el film YO ROBOT ( 2004, con el famoso Will Smith ) del genial novelista ISAAC AZIMOV, donde la rebeldía robótica y organizada nos hace recordar al preocupante film EL PLANETA DE LOS SIMIOS.

Novelas románticas hay por montones, desde las medievales con príncipes azules, hasta las de Corín Tellado o las comerciales de Hollywood. Pero siempre hay alguien dispuesto a romper el esquema, haciendo cambios drásticos en los personajes de tal manera que la fealdad de éstos no distorsionen la verdadera esencia de la historia : el amor. Así nacieron engendros amantes y apasionados como el Conde Drácula, la Bestia ( de “La Bella y la Bestia” ), Imhotep ( de “La Momia” ) y el inolvidable robot “Andrew” de la novela EL HOMBRE BICENTENARIO también del maestro ISAAC AZIMOV ( y convertida en película en el año 1999 con el genial Robin Williams ) que se enamora y llega al punto de decidir ser humano y hasta morir “como uno”.


TELETRANSPORTACION

Esta es otra de las tantas invenciones de la imaginación humana, de la cual sabemos que es imposible de realizarse. Sin embargo, según testimonios, tal parece que una vez sí sucedió, en forma imprevista y descontrolada, sin que los científicos se lo hubieran propuesto, y bajo los efectos de las ondas electromagnéticas ( http://es.wikipedia.org/wiki/Experimento_Filadelfia ). Debido a las consecuencias que pudieron acarrear una mala propaganda al gobierno, es que se ocultó este suceso, y por la misma razón, no se intentó una vez más. A pesar de ello, se hizo una película que no reflejó la verdad testimonial, sino más bien se disfrazó como un viaje en el tiempo.
De todos modos, para los productores cinematográficos no es problema asumir la Teletransportación como un hecho futurista, como en la famosa serie STAR TREK en la que ningún aficionado se pregunta cómo es que se logra ese fenómeno, colocando dicha serie ( aunque creadora de tal invento ) en una posición casi pueril. A diferencia de ello, está la famosa película LA MOSCA ( 1986, dirigida por David Cronemberg ) donde aquella extraña máquina, llamada “Telépodo” adquiere “alguito” de realismo al ser una máquina ideada bajo programas digitales que son capaces de desintegrar y reintegrar un organismo vivo, pero no basta, eso es pura tecnología, falta el fundamento esencial y científico, muchas veces basados en simples o complicadas fórmulas, o en las propiedades de alguna sustancia. Mientras no exista dicho fundamento, la teletransportación u otra invención, es un simple sueño imposible.


CLONACION

La Clonación sí es un hecho científico, el cual, antes de la oveja Dolly, no se le había hecho mucha propaganda, pero luego del animal en cuestión, la ciencia cambió totalmente su imagen y se vio que el futuro ya no se fundaría en los viajes espaciales sino en la GENÉTICA, pues aún hay mucho por descubrir aquí en la Tierra, y lo que se descubra aquí, será lo que se descubra en el universo.
Tal como dije en un capítulo anterior : … para planificar atrevidos viajes tan lejanos … se necesita no sólo de millones de dólares y alta tecnología, sino sobre todo, de astronautas genéticamente aptos, por no decir perfectos”Por lo tanto, el objetivo es clonar seres humanos, como en la película LA ISLA ( 2005, que protagonizan los actores Ewan Mac Gregor y Scarlett Johanson ) que nos muestra una visión humanista de lo que sería este fenómeno si se diera en forma indiscrimada e ilegal.


Los dejo con una canción del famoso rockero ALICE COOPER que en el año 1980 popularizó una canción referente a la clonación, mucho antes que la oveja Dolly.

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